¿Tan eficaces como las pintan?
La mayoría de las personas asocian una dieta depurativa con comer sólo fruta y beber agua e infusiones durante unos días. Son populares la dieta de la uva, o la dieta de la sandía, o de la piña, etc. En estas dietas se pierde mucho peso, pero en su mayor parte es agua, se elimina líquido que se vuelve a recuperar al volver a una alimentación normal, incluso a una dieta hipocalórica. No sirven para adelgazar.
En Medicina Natural estas dietas tienen un fin curativo, son dietas en las que el agua y la fruta aportan la fibra y efecto laxante y diurético y ayudan a limpiar el organismo, especialmente limpian el tubo digestivo, los riñones, el hígado y la piel, los órganos que acumulan más toxinas y que son detoxificadores y de eliminación.
Nunca hemos aconsejado como personas deportistas seguir estas dietas si no es por un motivo concreto y reguladas por un médico, ya que son incompatibles con una actividad normal, se recomienda hacerlas en el fin de semana para descansar y no hacer esfuerzos, así que es imposible hacerlas cuando se hace ejercicio y ya no digamos con el entrenamiento o competición.
Lo que sí puedes hacer si necesitas una detoxificación más intensa de la de 10 días, es hacer `24 horas depurativas´: empieza a contar después de hacer una comida temprana, por ejemplo a las 13:00 Horas del sábado, come fruta y bebe mucho líquido e infusiones sin cafeína durante 24 horas durante el resto del sábado y la mañana del domingo y acaba a las 13:00. Así puedes comer después (ligerito para no estropear la detoxificación) y hasta podrás entrenar el sábado por la mañana y el domingo por la tarde si te sientes bien.
Fuente: Ejercicios y Fitness