Si comes de forma consciente los manjares navideños y entrenas un poco más aprovechando los festivos, podrás disfrutar de la Navidad y hasta del turrón sin tener que ponerte a dieta al comenzar el año nuevo. En este artículo te damos algunos trucos.
1. Anticípate a los manjares. Planifica tu agenda de comidas y cenas para saber cuáles son los días “peligrosos” para tu cintura. “Quien avisa no es traidor” y saber lo que te espera te hará más fácil tomar comidas ligeras en forma de ensaladas, platos de verdura cocida y pescados y carnes a la plancha, antes y después de los ágapes navideños.
2. Separa las comilonas. Intenta dejar al menos uno o dos días entre las grandes comilonas para que tengas tiempo para quemar las calorías extras con ejercicio.
3. Lleva la tripa llena al banquete. Es un grave error dejar de comer durante el día para ahorrar calorías y reservarlas para la gran cena de Navidad, así lo único que conseguirás es llegar con tanto hambre que devorarás los platos más calóricos sin pensar. Desayuna bien (fruta, lácteos, pan y atún) antes de los banquetes aunque te levantes tarde y recuerda tomar un tentempié unos 60 o 90 minutos antes de las cenas navideñas, en forma de frutas naturales con un puñado de frutos secos con yogur natural o con una tostada de pan de cereales con queso fresco.
4. Un capricho al día. La Navidad sólo pasa una vez al año y hay que disfrutarla pero sin caer en la glotonería y la gula a todas horas. Lleva la cuenta de tus alimentos “prohibidos” para dosificártelos, especialmente de los dulces navideños pues una figura de mazapán puede tener 150 calorías, gánatela cada día.
5. Regala las sobras navideñas. Reparte entre tus invitados los restos de las comidas librate de las tentaciones en la nevera, así te será más fácil hacer un día o dos de comida ligera después de cada fiesta.
6. Pésate cada mañana. No te resistas a la báscula, es mejor saber cuántos gramos has ganado en la última cena para eliminarlos cuanto antes con un día a dieta o una carrerita de 1 hora, que esperar al 7 de enero para enterarte de que has ganado 5 kilos en Navidad.
7. Muévete en Navidad. No sólo se queman calorías en el gimnasio, aprovecha las compras de regalos navideños para andar un poco más, evita los atascos andando o con los transportes públicos, baila en las fiestas, haz la compra, juega con los niños, etc., todo movimiento vale a la hora de eliminar grasa.
8. Habla durante los festines. Si mantienes la mente y la boca ocupada durante las comilonas, comerás menos. Aprovecha las reuniones familiares para ponerte al día con la vida de tu tía Dorita o de tu sobrinito Pepito. Deja de ser la “oveja negra” de la familia y relaciónate “un día al año no hace daño”.
9. No te ahogues en alcohol. Controla las copas de vino y licores de cada día, un cubata te aporta entre 400 y 500 calorías, equivale a una hora de carrera a ritmo rápido. Escoge siempre vino tinto que al menos aporta sustancias cardioprotectoras y no tomes más de copas en cada comida, menos si eres mujer.
10. Duplica el tiempo o la intensidad de tus entrenamientos. Si te gusta comer sólo hay una forma de no sufrir en Navidad, entrenar el doble para permitirte disfrutar de los manjares sin mala conciencia. Aprovecha los días de fiesta para hacer ejercicio aeróbico (carrera, bicicleta, natación, remo, etc.) sin olvidarte de un par de sesiones de fuerza al día.
Fuente: Fisicoculturismo y Fitness