Independientemente del sexo el entrenamiento de brazos puede mejorar en forma, fuerza y definición siguiendo las siguientes pautas:
– Mantener una técnica correcta y control sin sacrificarla por el peso.
– Mantener en lo posible el efecto bisagra es decir la posición del codo en la flexión o extensión para evitar así comprometer a otros músculos o una posible lesión.
– Cuando se entrene los tríceps no buscar una mayor hiperextensión, lo cual no solo aumenta la tensión sino que promueve lesiones.
– Mantener siempre una tensión continua evitando pausas o contracciones prolongadas.
– Mantener una postura correcta del tronco y pies. Evita llevar un pie adelante.
– Evitar en el principiante las superseries y series compuestas, si bien permiten una mejor congestión y rompe el aburrimiento, también se incrementa o dispara la concentración de lactato aumentando el riesgo de lesión.
– En la flexión de brazos para bíceps no elevar el codo, pues de esta manera se involucra al músculo deltoides y disminuye la tensión sobre el bíceps.
– Los fondos o planchas para tríceps es uno de los mejores ejercicios para las mujeres y se pueden alternar bien con extensiones con barra Z o en último caso extensiones en la polea.
– Si hay desventaja genética se puede aumentar el volumen de series o incluso su frecuencia de entrenamiento. El principiante debe ir de a poco es decir progresivamente.