Con el domingo amaneciendo llegamos a la última jornada del stage. Debido a las previsiones climatológicas, la noche anterior decidimos variar el programa de esta última jornada y suspender la salida larga prevista en bici (de unos 120 kms,) y sustituirla por una más corta, seguida luego de otro entrenamiento en la piscina olímpica.
Tras desayunar nos pusimos en marcha y decidimos hacer un recorrido muy rodador y prácticamente llano: Calella-Mataró-Calella.
Al llegar al hotel, dejamos las bicis y nos dirigimos a la piscina para realizar cada uno un entrenamiento libre, a nuestro aire. En mi caso hice 1600m cómodos, disfrutando cada una de las brazadas que daba en este lujo de piscina olímpica.