Imagen de masmusculo.com «Si haces siempre lo mismo, no esperes resultados diferentes» (A. Einstein)
Es bueno cambiar de método de entrenamiento: todos sabemos que tras un período de tiempo haciendo todos los días lo mismo, ya sea cardio, series piramidales o clases de spinning, el cuerpo se acostumbra y deja de responder. Si queremos evitar este estancamiento tenemos que probar distintas formas de entrenar, y por eso hoy me he animado con series de 40 repeticiones.
Os explico cómo he llegado a ésto, porque tiene cierta gracia… Hace unas semanas estuve entrenando con unos socios de mi club: el trato era entrenar a mi manera, es decir, haciendo un circuito diseñado por mí con el Gymboss (50 segundos de trabajo + 10 segundos de descanso entre estaciones). Los chicos en cuestión son de los que entrenan siempre tirando fuerte en peso libre (con su cardio al final también, eh?), y yo me aproveché un poco y diseñé unos circuitos con ejercicios funcionales (y bastante mala leche) para «lucirme».
Pero hoy se han tomado la revancha: hoy me tocaba a mí entrenar a su manera, con series de 40 repeticiones. El concepto es el siguiente: hay que hacer las 40 repeticiones de una sola vez, podemos parar las veces que queramos, pero sólo 3 segundos. La carga que debemos manejar no tiene que ser muy alta: más o menos que nos permita hacer entre 10 y 15 repeticiones llegando bastante cansados. Las 25 restantes las haremos «como podamos», pero generalmente será en una cantidad descendente: primero 5 seguidas, luego 4, 3… y las 5 últimas de una en una, porque ya no podremos ni con nuestra vida… Os dejo la rutina de pecho-tríceps (ya sabéis, todas las series de 40 repeticiones):
– 2 series de press plano
– 2 series de press inclinado
– 2 series en la contractora
– 2 series de tríceps en polea alta
– 1 serie en el press de tríceps
Mi experiencia: me lo he pasado muy bien, pero he acabado muerta! Nunca había trabajado de esta manera, y lo he notado… Este método es genial para entrenar fuerza-resistencia, pero hay que ser honesto y escoger un peso con el que nos cueste de verdad. Por supuesto, ¡ellos lo han hecho mucho mejor que yo!, pero dadme tiempo… 🙂
¿Qué opináis? ¿Habéis entrenado alguna vez así? ¿Os animáis a probarlo?
Fuente: Lady fitness