Ganó el Campeonato de España de Culturismo 1971, un premio literario en 1977, y ha edificado una casa de dos alturas con sus propias manos
Fotos gentileza de José Viñas, le vemos en 1971, su mejor momento. Archivo Agencia Febus
José Viñas es uno de los personajes más sorprendentes del panorama culturista internacional. Además de ser uno de nuestros más grandes campeones es un excelente escritor, un gran pensador y un edificador de primer orden. Edificador en el concepto más amplio de la palabra. Ha construido, con sus manos y prácticamente solo, su casa de campo: cimientos, mampostería, albañilería, fontanería, electricidad, etc, muy cerca del pueblo de Cenicientos. En tierras castellanas. Y lo más encomiable es que la mayoría del conocimiento adquirido para llevar a cabo tan magna obra ha sido producto de la lectura y el estudio de libros referentes.
Sus comienzos
José Viñas nació el 28 de diciembre de 1946 -no fue ninguna broma- en Madrid. Hijo de un gran ebanista del cual heredó las habilidades manuales para el trabajo, siendo adolescente comenzó a entrenar con pesas en el gimnasio de La Ferroviaria de Madrid. Ese deporte se convirtió en su gran pasión. Estudió bachiller, luego empezó a trabajar en una oficina como auxiliar administrativo y en su juventud formó parte de la selección española juvenil de fútbol, ganó el Campeonato de Castilla de lucha grecorromana y el Campeonato de Castilla de remo olímpico. Después de cumplir el servicio militar montó, con Eduardo Franco y Jesús Mario Muñoz, el gimnasio Fuerza y Salud, que después pasó a denominarse Muvia.
Participó en las primeras competiciones de culturismo
José Viñas participó el la primera competición de culturismo, como hoy lo conocemos, en Madrid: el Mr. Heracles 1965. Unas semanas después haría lo propio en el Mr. Madrid. Al poco tiempo vinieron sus primeros éxitos deportivos. En 1967 obtuvo el subcampeonato del Mr. Madrid. Su triunfo más relevante lo consiguió en 1971 cuando se proclamó campeón de España. Esa victoria le supuso el pasaporte para representar a España en el Mr. Universo IFBB 1971, en París, donde coincidió con Baldo Lois, Carlos Visedo, Franco Columbo, Albert Beckles, Ed Corney, Ken Waller y Arnold Schwarzenegger. Ese mismo año ganó el Campeonato Mediterráneo. En 1974 se proclamó campeón del Mr. Madrid.
En 1977 ganó un premio literario
Su gran inquietud por conocer todos los principios básicos de los deportes que practicó le animó a escribir varios libros de culturismo. Uno de ellos, El Tratado Culturista, ganó en 1977 el premio literario de la editorial Hispano Europea «Heracles», dotado con 50.000 pesetas. Hoy se sigue vendiendo en librerías deportivas. Y hoy José Viñas sigue escribiendo, precisamente, la biografía de uno de los más grandes atletas de la antigua Grecia.
En 1979 decide construirse su propia casa
Ya apartado de la competición culturista y de los gimnasios, comienza un nueva etapa profesional como directivo de una de las más importantes farmacéuticas del país. Y en 1979 decide, en su tiempo libre, empezar a edificar una casa en su finca, cercana a Cenicientos. Exceptuando la cimentación, donde utilizó la maquinaria pertinente, el resto del edificio lo levantó con sus propias manos, como él dice “a lo romano”. Es increíble observar esos 500 metros cuadrados, divididos en dos alturas, y pensar que un sólo hombre ha sido capaz de llevar a cabo dicha empresa. El piso bajo está construido de piedra. Piedras de 50 y 60 kilos cada una. El mismo cuenta con una cocina rústica de uno 100 metros cuadrados, dos dormitorios, un baño, un salón pequeño, con chimenea y una escalera señorial que conduce al primer piso, donde destaca un enorme salón, también con chimenea, de 100 metros cuadrados y un dormitorio de 40. Desde el mencionado salón se accede a la buhardilla habilitada como estudio y con dos camas más. En definitiva, una casa construida, en 15 años, con un acabado perfecto y digno de la mejor cuadrilla profesional.
Un gimnasio de más de 100 metros cuadrados
El amor de José Viñas por el culturismo le llevó a edificar otro edificio para utilizarlo como gimnasio. Tiene máquinas de todo tipo: multipower, poleas varias, bancas, mancuernas y barras fijas, peck-deck, prensa de piernas, bicicletas, etc. La mayoría de la maquinaria es relativamente moderna pero hay alguna reliquia de los años 70. Y todo en un espacio de unos 100 metros cuadrados. Sin duda, entrenar rodeado de tanta naturaleza, inspirando aire puro y limpio, es una de las mejores sensaciones posibles.
Al escuchar conversar a José Viñas uno se da cuenta de que es un gran intelectual, un digno heredero de aquella generación del 27 que forjó la mejor la mejor época de la cultura española. Un intelectual que ante todo es culturista. Un culturista que lleva entrenando 48 años. Sin duda, al igual que sus grandes amigos, Carlos Flórez, Eduardo Franco, Adolfo Robles o José Luis Santos, un ejemplo para todos.
Entrevista a José Viñas: