Los calambres, agotamientos, dificultades de movimiento, son síntomas de un golpe de calor, es decir cuando un deportista sale de golpe al clima caluroso, sin ajustarse gradualmente al mismo, y posee una relativa deshidratación.
Estos problemas pueden ser incluso severos, por lo que en esos casos se necesitará una atención médica de emergencia. Pero todos estos efectos podrían evitarse si las personas se tomaran un tiempo para ajustarse al calor, ingirieran los líquidos adecuados, y mantuvieran una dieta adecuada de electrolitos.
Es imprescindible beber muchos líquidos, se debe mantener una ingesta de líquidos adecuada, para reemplazar las pérdidas provocadas por el sudor.
Para esto, 15 o 30 minutos antes del ejercicio, se debe beber 0,5l. de líquido, durante el ejercicio se deben beber 250cl. cada 15 minutos, y al terminar el ejercicio se debe beber otro 0,5l. de agua/ o líquido electrolito, como las aguas salificadas, por cada medio kilo perdido; tambien es recomendable usar ropas livianas y claras, como por ejemplo las mallas.
La larga exposición a ambientes muy cálidos y/o húmedo; experimentar mucha transpiración; no reemplazar adecuadamente los líquidos y los electrolitos; perder peso por entrenamientos previos y no reemplazarlos con la adecuada hidratación, puede ser peligroso para la salud, pudiendo ocasionar un golpe de calor o un deshidratación severa en el deportista.
Fuente: WELLNESS PERSONAL