Libre de las llamas del deseo.
Dame una mente
Libre de las olas del engaño. Oh Señor, dame ojos Que no vean más que Tu gloria. Dame una mente Que se deleite en Tu servicio. Dame un alma Embriagada por el vino de Tu sabiduría. Oh Señor, mi deseo es encontrarte Pero mis fuerzas no alcanzan Para comprenderte. Recordarte es el solaz De mi apenado corazón, Constantes compañeros son los pensamientos de Ti, Te aclamo noche y día. La llama de Tu amor brilla En la oscuridad de mi noche. Oh Señor, quien Tú matas no huele a sangre, Quien Tú quemas no huele a humo, Pues aquél que quemas es feliz ardiendo, Y aquél que matas se deleita en la muerte. Oh Señor, aunque venenosa sea la flor azul Es de Tu jardín, Y aunque ‘Abdullah sea un pecador, Es de Tu pueblo. Oh Señor, cuando pienso en Tu compasión Me siento como un rey coronado; Cuando pienso en mis pecados Soy como polvo, y aún menos que el polvo. La vida de mi cuerpo palpita sólo por Tí.
Mi corazón late resignado a Tu voluntad.
Sí la hierba creciera sobre mis cenizas
Cada brizna temblaría con devoción a Ti. GRITOS DEL CORAZÓN – ANSARI http://www.unizar.es/idiomas/arabe/poesia/ansari/ansari1.html
Fuente: YOGA EN BADALONA