2. POLVOS COMPACTOS MADERAS de MYRURGIA.
3. AMPOLLAS PHOTO-AGE de MARTIDERM:
Un tratamiento antiedad que realizo siempre un par de veces al año (normalmente para la primavera y el otoño). Tanto estas ampollas como las de proteoglicanos me encantan!!! Son mano de santo para la piel. Podéis obtener más información Aquí.
4. CORRECTOR MAGIC CONCEALER de HELENA RUBINSTEIN.
He probado muchos correctores y muchos de ellos me han convencido, pero si me tengo que quedar con uno … me quedo con el corrector Magic Concealer de Helena Rubinstein. Me lo descubrió mi madre hace ya bastantes años y desde entonces se ha convertido en MI corrector.
5. BÁLSAMO LABIAL CARMEX.
Sin duda un imprescindible en mi neceser, en mi bolso y en mi mesilla de noche. Por ahora no le he encontrado substituto.
6. FRAGANCIA DE MORA de YVES ROCHER.
Esta fragancia llevará conmigo como 14 añitos y no me canso de ella. Es cierto que para ocasiones especiales recurro a otras fragancias más intensas, pero para un día normal de trabajo es, junto a un par de fragancias de L’Occitane, con la que me siento más cómoda.
7. CREMA DE MANOS GINKGO’S SECRET de RITUALS.
No sólo me fascina su resultado (manos hidratadas y suaves) sino que aplicarse esta crema es todo un festival para los sentidos: aroma riquísimo y textura aterciopelada.
Fuente: MY WELLNESS LAB