Bicicleta elíptica: entrenamiento cardiovascular

¿Qué queremos conseguir con nuestro entrenamiento cardiovascular? El beneficio principal que experimentamos con este tipo de entrenamiento es el fortalecimiento del corazón y aumento de su capacidad de bombeo, el aumento de la capacidad pulmonar y mayor oxigenación de la sangre, y la mayor capilarización muscular, de modo que llega más cantidad de sangre a los músculos. Además, si practicamos ejercicio cardiovascular con constancia reduciremos nuestra frecuencia cardíaca y el riesgo de padecer patologías graves como ataques al corazón o embolias.
Imagen de blog.boutiquedefitness.es
Como podéis ver, el ejercicio cardiovascular es una fuente inagotable de beneficios pero hay mucha gente que, por problemas de lesiones, no se atreve a practicarlo. En estos casos siempre debemos acudir a la opinión de un médico en primer lugar, y de un profesional del fitness en segundo, que nos aconsejen cuál es el mejor ejercicio en cada caso.
Imagen de enelgimnasio.com
Uno de los ejercicios cardiovasculares que menos impacto produce en el organismo, y por tanto uno de los más seguros, es la bicicleta elíptica: en la elíptica se realiza un entrenamiento funcional, de modo que reproducimos un movimiento que realizamos en nuestra vida cotidiana (es similar al de la carrera), pero ahorrándonos el impacto contra el suelo, que repercute en la cadena muscular que va desde la planta del pie hasta la columna vertebral. Muchas personas que sufren lesiones de rodilla (como yo misma) practican ejercicio en la bicicleta elíptica, que nos acompaña en todo el recorrido del movimiento sin impacto. Además, la posibilidad de ejercitar los brazos al mismo tiempo que las piernas nos proporciona un trabajo completo de todo el cuerpo. No olvidéis contraer los abdominales para mantener una postura correcta durante toda la sesión de ejercicio.

Y tú, ¿qué ejercicio cardiovascular practicas?

Fuente: Lady fitness

Scroll al inicio