La elasticidad muscular es la capacidad de los músculos en distenderse y recuperen su largor inicial tras efectuar una contracción; este proceso depende sobre todo del largor inicial de las fibras musculares, ya que cuánto mayor es la longitud de las mismas, más amplio será el movimiento de contracción y distensión posibilitando una mayor la elasticidad muscular que es una propiedad que no se mejora con los ejercicios de esfuerzo sino a través de los estiramientos de las fibras musculares en los calentamientos aumentando indirectamente la fuerza y la potencia.
Mientras el tono muscular corresponde a la tensión interna a que los músculos son sometidos, de modo a permitir que el cuerpo y varios segmentos esqueléticos se mantengan en equilibrio cuando están en movimiento o cuando permanecen inmóviles.
Dado que el tono muscular es controlado por el sistema nervioso autónomo, acostumbra intervenir en el equilibrio corporal y en otras funciones importantes.
De hecho, la tensión de los músculos de las piernas favorece el impulso de la sangre de los miembros inferiores para el corazón, mientras que la tensión de los músculos de la pared abdominal contribuye a la protección y fijación de los órganos internos.
La prolongada inactividad física propicia el desarrollo de una hipotonia o déficit de tono muscular; en contraste la práctica regular de ejercicio físico contribuye para el mantenimiento de un tono muscular adecuado previene los problemas provocados por la hipotonia.
Por otra parte la resistencia muscular es la capacidad de los músculos para realizar un esfuerzo moderado durante un determinado periodo de tiempo; esta calidad depende en gran medida de la cantidad de oxígeno que el sistema cardiorrespiratorio consigue transportar hacia los músculos.
Los ejercicios físicos que propicien el desarrollo de un esfuerzo muscular moderado y prolongado, igualmente conocidos como ejercicios de resistencia (por ejemplo correr, pedalear o escalar ), mejoran significativamente la capacidad cardiorrespiratoria y el índice de extracción de oxígeno por parte de los músculos, aumentando la resistencia muscular.
Fuente: Fisicoculturismo y Fitness