Hablar de salud, a menudo, nos lleva a pensar en los aspectos más exteriorizados del ser humano, es decir, para muchos ( más aún en la cultua occidental, aunque ésto está cambiando) el estar sano significa tener un buen cuerpo ( atendiendo a los cánones de belleza actuales) Sin embargo, son otros muchos los que entienden que la salud es mucho más que un cuerpo bonito, se trata de un bienestar no sólo a nivel físico, sino también a nivel mental y espiritual.
Pues bien, dentro de estos tres niveles, absolutamente compatibilizables entre sí, podemos ejercitarnos bien para prevención de posibles enfermedades o bien como tratamiento para las mismas.
Joseph Pilates, ya hace muchos años, cuando creó el Método Pilates, fue conocedor de la importancia del entrenamiento del cuerpo y cuales eran los beneficios para las personas, por un lado sanas que querían cuidarse o enfermas que lo que buscaban eran sanar o paliar los efectos de su mal.
Profesionales de la salud, en su día y en la actualidad, viendo la importancia de este Método, han querido no sólo recomendar la práctica del mismo, sino que se han involucrado hasta llegar a aprender en qué consistía. Así, por ejemplo, cada vez más, los fisioterapeutas se forman en Método Pilates y son muchos los médicos que aconsejan, junto a la natación, la práctica del Pilates en dolencias musculares y de los huesos, como rehabilitación.
Por tanto, el Método Pilates integra el acondicionamiento físico y el control de nuestro cuerpo y del movimiento.
Se trabajan entre otros el sistema músculo-esquelético, con una correcta alineación postural, el sistema osteo-articular, la tonificación del aparato muscular y el control motor. Que todos y cada uno de éstos esté en armonía con el resto es indispensable para una buena calidad de vida, de modo que si uno falla, el resto no funcionará como es debido.
Recuerda que la práctica del Método se ha de realizar por instructores titulados, que no ha de resultarte doloroso y que la práctica del mismo ha de estar controlada en todo momento, así evitaremos lesiones.