El síndrome de la barriga hinchada es un padecimiento que se presenta en los seres humanos sin distinción de edad, sexo, raza o cualquier tipo de cosa que nos diferencie. Se caracteriza básicamente por generar fuertes espasmos en la zona abdominal los cuales en determinadas ocasiones se vuelven intolerables y a la vez causan gran cantidad de gases y flatulencias convirtiéndose en una dolencia incomoda no sólo para la parte física si no mental de la persona que lo padece.
Esta enfermedad se considera como una dolencia altamente peligrosa si no se le presta atención desde el primer momento en que se presenta toda su sintomatología, en muchas ocasiones ha sido causante de muerte. Los síntomas más significativos de la barriga hinchada son los siguientes:
• Una gran inflamación en la zona abdominal o vientre del afectado.
• Estreñimiento e incapacidad de deponer.
• Alta sensibilidad y aumento de la temperatura corporal.
• Sudor frio y por ende manos frías y sudorosas.
Los cuatro puntos anteriores son los más relevantes síntomas de este extremo padecimiento que se produce debido al consumo de alimentos en mal estado, en especial comida proveniente del mar ya que está es una comida muy delicada que debe comerse lo más fresca posible. También genera la inflación en la barriga el consumo de agua no tratada de las cual no se garantiza su potabilidad y pueden tener un alto contenido de microorganismos perjudiciales para el aparato digestivo. Así mismo alimentos mal preparados, sin un buen nivel de cocción pueden producir esta enfermedad.
Para tratar esta peligrosa aflicción primero que todo y como ya se mencionó anteriormente se debe acudir los más rápido posible al especialista, en este caso particular se recomienda visitar a un Gastroenterólogo – profesional en enfermedades gástricas –, este actuará de manera inmediata haciendo un profundo lavado estomacal al paciente para eliminar los diferentes contaminantes presente en el aparato digestivo del enfermo.
Luego del lavado estomacal se podrá notar una disminución casi que instantánea de la inflamación en la barriga y por ende en los intestinos, los cuales darán paso a toda esa materia contaminada existente en el estomago del enfermo y la cual es el principal ingrediente del malestar del paciente.
Pero en este punto no termina el tratamiento. Precisamente el especialista recomienda seguir un tratamiento por unos 3 ó 4 días más haciendo enemas – introducción de líquidos en el recto y colon por el ano – para combatir el estreñimiento puesto que este puede perdurar por unos días más y volver a generar una hinchazón en la barriga. Los líquidos para los enemas son dados por recomendación directa del médico especialista y generalmente son infusiones de productos orgánicos y naturales que no producirán ningún efecto descomunal en el organismo del paciente.
Por último y para mantener una estabilidad en la salud y no volver a padecer de este mal, es recomendable establecer una dieta que elimine el consumo de productos grasos los cuales podrían volver a generar una inflación estomacal en un aparato digestivo altamente resentido.
Fuente: Todo Fitness