La figura del fisioterapeuta en los equipos de salud mental es poco común en España, mientras que en la mayoría de los países europeos es ya una realidad.
El trastorno mental afecta directamente al estado físico de la persona, por lo que el fisioterapeuta aporta, dentro del equipo multidisciplinar, un “gran apoyo” en la evaluación y tratamiento de los pacientes con enfermedad mental.
Los trastornos mentales han sido reconocidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como uno de los problemas crónicos más frecuentes en la mayoría de las sociedades desarrolladas.
En este sentido, a Salud Mental es uno de los muchos campos en los que está presente la Fisioterapia. Así, el fisioterapeuta utiliza un gran número de técnicas dirigidas a mejorar los síntomas y la calidad de vida, así como la autonomía de quienes padecen trastornos mentales.
Estos trastornos, suelen ir acompañados de síntomas físicos, por lo que una intervención terapéutica física incidiría directamente sobre el estado mental del paciente.
El papel del Fisioterapeuta, en este ámbito, incluye la evaluación y tratamiento de pacientes con dolor, demencias, Parkinson, ansiedad y depresión, trastornos de la personalidad, desórdenes alimentarios, adiciones y lesión cerebral, entre otras.
La intervención del profesional incluirá estrategias tanto preventivas como terapéuticas dirigidas a mejorar el estado del paciente. En cuanto a la evaluación, el fisioterapeuta valorará la movilidad, funcionalidad, memoria, lenguaje, equilibrio y coordinación, así como autonomía, percepción sensorial y corporal, dolor, tensión muscular, alteraciones de conducta, estado motor y cognitivo, etc.
En lo que respecta al tratamiento, la labor del fisioterapeuta abarca la actividad física, ejercicios, trabajo del equilibrio, la coordinación, reeducación postural, relajación, conciencia postural, terapia psicomotora, estimulación multisensorial, y ergonomía, entre otros.
La figura del fisioterapeuta en los equipos de salud mental es poco común aún en España, mientras que en la mayoría de los países europeos su presencia es ya una realidad.
¿Algún día llegarán los fisioterapeutas españoles a estar a la altura de los fisioterapeutas del resto de Europa? Esperemos que sí! 🙂
Fuente: Fisiocatessen