La discusión de la conexión mente-cuerpo es tan antigua como los tiempos y se levanta de vez en cuando como un maremoto. La década de 1970 y 80 tuvo una tendencia centrada en el ser físico. Enfoques con lemas infames como «ningún dolor, ninguna ganancia» o «trabajar hasta que no puedas más».
Más recientemente, la industria del fitness ha devuelto un enfoque cuerpo-mente más tranquilo, más introspectivos. Sistemas integrados mas refinados sobre el ejercicio y el movimiento. Hemos visto crecer en popularidad el yoga y el pilates, un énfasis en el cuidado del cuerpo en lugar de castigar y un enfoque renovado en el poder de la conexión cuerpo-mente.
Hoy en día esta conexión se está demostrando científicamente, no sólo con las encuestas, sino también con la investigación basada en los efectos en el cerebro que se producen como consecuencia de los cambios en el cuerpo, y viceversa.
Joseph Pilates creó su sistema de ejercicios con la intención de afectar positivamente a todos los aspectos de la vida de una persona – desde el movimiento a las relaciones interpersonales y a un mayor rendimiento en las tareas diarias – liderando el camino a un estado de bienestar total.
Él creía que la práctica generalizada de su sistema, basado como está en la conexión cuerpo-mente, que eliminaría muchas enfermedades y males sociales. El método Pilates es más que una serie de ejercicios, es un acercamiento a la vida, una filosofía.