Desde siempre el ejercicio aeróbico y sobre todo la carrera se ha asociado con la pérdida de peso. De hecho muchas personas no realizan esta actividad para no perder peso y así conseguir un correcto desarrollo muscular. A pesar de todo, la carrera tiene más beneficios de los que creemos, y por ello en este post queremos demostrar que la práctica de la carrera no acabará consumiendo nuestro músculo, sino todo lo contrario, que podemos aumentar el tamaño muscular mientras corremos.
Desde luego que esto depende mucho de la manera en la que llevemos a cabo el ejercicio aeróbico, ya que existen diferentes niveles de trabajo y de intensidad del mismo, y por ello es necesario que sepamos diferenciar a la hora de muscular y a la hora de perder peso el tipo de actividad que vamos a llevar a cabo. En esta ocasión queremos analizar detenidamente los efectos que la carrera tiene en nuestros músculos.
Primeros resultados
En primer lugar vamos a destacar que una persona que no esté acostumbrada a practicar ejercicio los primeros meses ganará masa muscular al practicar carrera, ya que la carrera implica fuerza y resistencia de piernas, algo que pasa por hacer que nuestros músculos trabajen para conseguirla. De este modo, si no tenemos un nivel mínimo, los músculos tenderán a crecer hasta cumplir las necesidades que nuestro cuerpo tiene a la hora de practicar carrera, creciendo y desarrollándose.
A esto descrito anteriormente hay que sumar la pérdida de grasa y la mejora muscular que conlleva la carrera, ya que al realizar un ejercicio aeróbico conseguiremos quemar más calorías y con ello la pérdida de parte de las reservas de grasa del organismo, consiguiendo unas fibras musculares de mejor calidad, ya que estarán libres de grasa. Esto mejorará el tono muscular considerablemente y el rendimiento muscular.
Entrenamientos superiores
A medida que pasa el tiempo y los músculos se acostumbran al ejercicio habitual y por lo tanto llegamos a un momento de estancamiento que debemos superar si queremos seguir evolucionando tanto a la hora de conseguir resultados como a la hora de aumentar la masa muscular a través de la carrera. Para lograrlo es necesario cambiar el modo de entrenar y centrarnos en la ejecución de carreras cortas pero intensas.
Concentrar toda la tensión en un corto periodo de tiempo nos ayudará a aumentar la tensión muscular en las partes afectadas a la hora de llevar a cabo la carrera, y con ello el desarrollo de los mismos. Lo mismo sucederá si incorporamos subidas y terrenos complicados a los entrenamientos, ya que aumentaremos la resistencia y con ella la fuerza que debe desarrollar nuestro cuerpo para vencer dicha resistencia.
Para la realización de este tipo de entrenamiento es necesario que controlemos previamente la técnica aeróbica, es decir, es necesario que tengamos un fondo y una resistencia que ya hemos trabajado previamente. Además, este tipo de entrenamiento no nos permitirá prolongar demasiado el tiempo en el que estaremos corriendo, ya que al tratarse de ejercicios de intensidad serán cortos en el tiempo y necesitaremos amplios descansos entre serie y serie para recuperar el estado muscular y poder volver a ejecutar la rutina de nuevo.
A pesar de todo, es cierto que si queremos conseguir unos músculos en perfecto estado debemos alternar ambas formas de carrera, es decir, la tradicional en la que la intensidad es baja o media y se realizan carreras durante largo tiempo, o esta en la que lo que haremos será desarrollar la musculatura y mejorar la resistencia. Con ambas formas de entrenar conseguiremos un equilibrio adecuado para encontrarnos en plena forma sin que los músculos se consuman por ello.
Fuente: Fisicoculturismo y Fitness